Quito, 1 de agosto de 2017
Redacción FIDAL
Constructivismo 1917 - 2017
Fundación para la Integración y Desarrollo de América Latina (FIDAL) promueve la exposición itinerante “Constructivismo del Siglo XXI”, del artista guayaquileño Tony Moré.
Fundación FIDAL abrirá sus puertas para exhibir 17 obras, de pintura abstracta, del artista guayaquileño Tony Moré. Su inspiración es producto de un trabajo investigativo respaldado en la realización de talleres artísticos, en la Rusia de principios del siglo XX, en donde nació el constructivismo.
Tony Moré, heredero de la vocación artística de su padre, el reconocido pintor, muralista, escultor, poeta y escritor esmeraldeño Humberto Moré, ha decidido conmemorar, con una exposición, los 100 años de la primera vez que se usó el término Constructivismo para describir -aunque de manera despectiva- una obra del artista ruso Aleksandr Ródchenko.
En la muestra, que se expondrá desde el 03 de agosto hasta 20 de agosto, el artista mostrará la combinación de los aspectos cromáticos, formales y estructurales de su pintura constructivista. “Este nuevo movimiento estético, basado en el cubismo, relacionado con la ingeniería y la arquitectura, es mi nueva propuesta plástica, el mismo que es construido matemáticamente y sus motivos no son ni objetos reales ni fantasías libres” sostiene Tony Moré.
Sobre Tony Moré
Guayaquileño nacido en 1953. Pintor, arquitecto y diseñador de interiores, siempre ligado al arte de una forma directa por ser hijo del maestro Humberto Moré. En 1969, Tony More comienza su actividad artística siendo tallerista de su padre y junto a sus hermanos participaron en la realización de 200 cuadros para el Hotel Continental. Así mismo, participó en la realización del mural y juegos infantiles para el parque de la ciudadela Ferroviaria.
Una vez terminados los estudios secundarios, decide ingresar a la Facultad de Arquitectura, fue poco lo que pintó en ese entonces ya que se dedicó a realizar trabajos de arquitectura y construcción en la Junta Nacional de la Vivienda, institución que lo formaría como profesional.
En 1984 se produjo la muerte de Humberto Moré, en La Habana (Cuba) hecho que lo comprometió con la memoria artística de su padre y lo llevó a pintar como profesional.
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